El ladrillo es uno de los materiales de construcción de gran durabilidad, versatilidad y con excelentes propiedades mecánicas. Sirve para crear muros o como acabado final de las fachadas, ofreciendo diversas texturas y un estilo muy natural.

Sin embargo, por las mismas características de este material y por los diferentes agentes a los que se encuentran expuestos los muros externos de un edificio o vivienda, las fachadas de ladrillo necesitan la intervención de empresas especializadas en la limpieza de muros de ladrillos.

¿Por qué es importante la limpieza de la fachada de ladrillo?

Las fachadas de ladrillo ofrecen un enorme atractivo estético, pero si no se planifica y ejecuta un buen plan de limpieza, la apariencia de los muros, así como su capacidad estructural puede verse considerablemente disminuida.

Hay que recordar que las fachadas se encuentran en constante exposición a las emisiones de los vehículos, a la lluvia, a la humedad, etc. Y también pueden ser objeto de grafitis. Por lo que, dependiendo del tipo de mancha, polvo o impureza que atrape la superficie de los ladrillos, puede que éstos:

  • Retengan gran humedad y sean medio para el crecimiento de musgo o algas, sobre todo en las juntas.
  • Muestren depósitos de cal o manchas de salitres, muy perjudiciales para los ladrillos.
  • Presenten manchas negras o grises, como efecto de la lluvia o del hollín de los vehículos.

Todas estas consecuencias pueden agravarse y traer serios problemas de humedad en el inmueble, ocasionando no solo la disminución de la eficiencia energética, también pudiendo afectar la salud de los que hacen vida en la empresa o habitan el inmueble.

En consecuencia, invertir en la limpieza de la fachada de ladrillo forma parte del mantenimiento preventivo. Además, mantiene la estética de la fachada del edificio, elevando la imagen de la empresa o comunidad de vecinos y proporcionando mayor confort y bienestar a los usuarios o habitantes.

Las mejores técnicas de limpieza de fachadas de ladrillo

Toda empresa de limpieza en Castellón evalúa y aplica la mejor técnica para limpiar las fachadas de ladrillo, de acuerdo al tipo de mancha o impureza que deba eliminarse. Siendo las mejores prácticas las siguientes:

Limpieza con agua a presión

Este método de limpieza emplea poca agua y es eficaz principalmente para la eliminación de manchas en general, tanto de la superficie del propio ladrillo como de las juntas (mortero). También sirve para la eliminación del musgo y algas.

Básicamente consiste en utilizar un equipo de agua a presión y dirigir el flujo sobre la fachada. Pero dependiendo del tipo y estado de los ladrillos, se debe regular dicha presión, iniciando con solo un poco e ir aumentando si es necesario.

Además, también se debe regular la temperatura del agua. Normalmente estos equipos pueden alcanzar los 150 °C, siendo ideal para disolver las incrustaciones y descontaminar los ladrillos.

Limpieza con chorro de arena

Esta técnica es muy efectiva, pero más abrasiva. Por lo que se utiliza preferiblemente cuando existe una contaminación o manchas persistentes o muy adheridas a los ladrillos. Por ejemplo, para la eliminación de grafitis.

Consiste en proyectar a alta presión pequeños gránulos de arena (sílice + abrasivo especialmente seleccionado) contra la fachada.

Tiene que ser aplicada por profesionales expertos, puesto que debe emplearse la granulometría adecuada para el tipo y estado del ladrillo. De lo contrario, puede causar daños irreparables sobre la superficie del mismo.

Limpieza a vapor

La limpieza a vapor resulta una de las técnicas más amigables con la fachada de ladrillos, siendo en algunos casos la mejor alternativa para eliminar el polvo, la pintura, los depósitos o manchas negras que deja el paso del agua, el musgo y cualquier materia orgánica.

En este método se emplea un equipo de alta presión que calienta el agua a elevadas temperaturas (aprox. 140 – 150 °C). Al aplicar sobre la superficie el vapor en conjunto con la presión se logran desprender todos los depósitos e incrustaciones contaminantes.

La limpieza a vapor es completamente recomendable para las fachadas de ladrillos o piedra de los edificios históricos protegidos.

Mantenimiento en casa

Para llevar a cabo la limpieza de los muros de ladrillos desde casa siempre resulta aconsejable, por lo menos, el uso de un equipo de agua a presión, para mayor efectividad y menor gasto de agua.

Si no tienes disposición de esta máquina, entonces debes barrer la superficie para eliminar el polvo. Seguidamente, trata de quitar la mayor cantidad de manchas o incrustaciones con un cepillo de cerdas más duras.

Para deshacerte de las algas, musgos o manchas negras puedes aplicar una mezcla de vinagre y agua con un cepillo. Después limpiar con poca cantidad de agua.

También se emplean productos químicos más fuertes, pero deben ser empleados solo por profesionales que tengan el conocimiento y el permiso para su manipulación.

Desde Limpiezas Virosa, te invitamos a contactarnos para recibir una limpieza de calidad empleada por profesionales y con las herramientas y métodos adecuados.